claudia: una vez que ellos rompieron se meten, y sujetan a mi esposo y lo tiran al suelo, y después se va al suelo, y lo empiezan a vendar las manos hacia atrás y le vendan sus ojos. carolina: confundida, ella recuerdo que empezó a gritar. claudia: no me decían nada, al contrario, uno de ellos dio la orden, y le dijo sácala. me levantan del suelo y me sacan de mi recámara. carolina: vendados y amarrados de pies y manos, claudia y su esposo, isaías flores pineda, fueron llevados en una camioneta oscura hasta la base naval de veracruz. ¿usted pudo verlos? claudia: cuando ellos me vendaron los ojos, realmente a mí no me los vendaron bien, o sea, fuertes, no, entonces si yo alzaba mi cara, yo podía lograr ver por esta parte de aquí. carolina: lo que les esperaba a su llegada sería aterrador. ambos fueron separados, a su marido se lo llevaron esposado a otro lugar. claudia: yo me encontraba, pues, con ropa de dormir, que era un short tipo boxer, una blusa de tirantes. esta persona, como yo iba siempre así, empezó a manosearme. carolina: de repente escuchó música, y tuvo la ce